En el ámbito educativo hay muchos mensajes contradictorios sobre las pruebas. Pruebas buenas, pruebas malas, pruebas inútiles y pruebas útiles. ¿Qué significa todo esto para su hijo?

Si ya ha tenido uno o varios hijos que han pasado por el sistema educativo de Ontario, es posible que haya tenido experiencia con las pruebas provinciales de 3º y 6º curso, las pruebas de matemáticas de 9º curso y la prueba de alfabetización de Ontario de 10º curso, necesaria para obtener el Diploma de Educación Secundaria de Ontario (OSSD). El propósito de las pruebas provinciales es alinear las expectativas de todas las escuelas de Ontario y garantizar que todos los niños reciban la instrucción en las habilidades básicas necesarias para el éxito estudiantil. ¿Por qué existe? Es el mecanismo de control de calidad de un sistema educativo que es muy diverso y que atiende a más de dos millones de estudiantes. Ayuda a calibrar el sistema educativo de Ontario con otros sistemas educativos a nivel internacional. Es una de las muchas herramientas que informan a los padres sobre el rendimiento de sus hijos de acuerdo con las expectativas establecidas en el plan de estudios de Ontario. Por último, genera datos para el estudio a largo plazo de diversas piezas educativas, con el fin de informar y mejorar la práctica docente, algo de lo que no se disponía en el pasado.

¿Las pruebas provinciales son pruebas normalizadas? Sí y no. Cada prueba tiene una finalidad concreta y se elabora para obtener un resultado determinado. El término "prueba estandarizada" suele referirse a pruebas que han sido validadas a través de la investigación y que se basan en normas referenciadas por criterios establecidos a través de la práctica de la investigación. Implican el estudio de una muestra de alumnos a los que se les ha aplicado la prueba mediante un proceso de "estandarización" para garantizar que la herramienta consigue el resultado previsto y la información buscada. Esta es la razón por la que los tests pueden pasar por varias versiones, por la que las preguntas se adaptan, modifican, cambian, eliminan y reescriben para mantener el material actualizado en el contexto de la cultura actual, los objetivos educativos y la relevancia para los estudiantes.

Algunos investigadores o personas pueden afirmar que cuanto más objetiva es una prueba, más estandarizada puede calificarse; al mismo tiempo, más limitado es el alcance de la información que revela. Cuanto más subjetiva es una prueba, menos estandarizada es, ya que los resultados están más abiertos a la interpretación (por ejemplo, párrafo, ensayo o escritura creativa). Los boletines de notas escolares se consideran más subjetivos porque sólo una persona evalúa a un alumno y las evaluaciones son creadas por cada profesor para evaluar las expectativas del plan de estudios. Las prácticas de marcado, puntuación y calificación han cambiado a lo largo de los años para incorporar resultados más globales a la hora de evaluar el trabajo de los alumnos. Se crean rúbricas de evaluación (tablas) que acompañan al trabajo de muestra del alumno para ayudar a los educadores a evaluar de una forma más estandarizada, pero el resultado sigue siendo mayoritariamente subjetivo. En comparación, las pruebas psicológicas o psicoeducativas son muy objetivas porque buscan respuestas específicas de un participante en función de las cuales se puntúan los resultados.

Por tanto, el tipo de prueba que hay que elegir depende de la información que se busque. Si lo que busca es el coeficiente intelectual o puntuaciones concretas en un ámbito, se decantará por las pruebas estandarizadas (por ejemplo, el SAT, que suele utilizarse para acceder a las universidades de EE.UU.). Las pruebas de educación suelen ser necesarias para acceder a determinados centros privados. Si se quisiera saber el grado de creatividad de un niño, se reunirían muchas muestras de trabajo y se utilizarían observaciones, comentarios anecdóticos del profesor, cuestionarios de comportamiento e intereses para determinar esta información (lo que ahora se denomina perfil de superdotado o talentoso).

¿Cuál es la diferencia entre una buena y una mala prueba? Una vez más, depende de la información que se necesite. A menudo se utiliza la herramienta equivocada para obtener un resultado que se interpreta y utiliza mal y que no sirve para planificar el éxito de un alumno. Una mala prueba es la que se crea o se utiliza para juzgar en lugar de medir, para demostrar algo que ya se sabe, o la que se crea apresuradamente sin dedicar tiempo a reflexionar sobre su propósito; estos ejemplos conducen a pruebas inútiles que son una pérdida de tiempo, esfuerzo y energía tanto para el estudiante como para el evaluador. Uno de los elementos más desafiantes de la práctica docente es perfeccionar la habilidad de evaluación y valoración necesaria para una buena planificación pedagógica.

Las evaluaciones del aprendizaje en el aula, las pruebas educativas, las pruebas provinciales y las pruebas estandarizadas son todas ellas pruebas útiles si se incorporan a un planteamiento global de planificación del éxito de los alumnos. Muchas perspectivas y resultados contribuyen a establecer el perfil de aprendizaje de un alumno y a mejorar su rendimiento.

Si desea saber más sobre las pruebas estandarizadas y el proceso, siempre hay oportunidades para que su hijo participe en un estudio de investigación. Actualmente, Pearson Assessment está llevando a cabo un estudio de estandarización para la nueva versión de la Escala Wechsler de Inteligencia para Niños (WISC-V) y se necesitan participantes de entre 6 y 16 años. Cada participante recibe 50 dólares como compensación por su participación en la sesión de tres horas. Las citas pueden reservarse directamente a través de Horizon Education Consulting. Si está interesado, póngase en contacto con nosotros para obtener más información y los formularios de consentimiento.

http://www.edu.gov.on.ca/eng/educationFacts.html